[Se acomoda para pasar un brazo por sobre tus hombros y atraerte cerca, exhalando despacio.]
Mi madre nos llevaba a nuestra dacha fuera de Moscú, una semana antes. Mi padre no iba con nosotros, siempre estaba muy ocupado con cosas del Partido. [Cierra los ojos. De alguna forma, hablar de esto y sentir la tristeza más familiar de la felicidad perdida de esos recuerdos es más sencillo que la tristeza de ahora.] Así que éramos ella y yo solos, por una semana, leyendo libros y escuchando música junto al fuego hasta que llegaba mi padre.