[Tiene ganas de decirte algo como POR QUÉ NO TE ACERCAS TÚ, pero sabe que está a la defensiva porque está molesto y frustrado e inquieto, y no quiere desquitarse contigo. Así que se muerde la lengua, y tras quedarse ahí un rato más, comienza a moverse vacilante hacia ti (y sujetándose el pijama que ahora le queda suelto, sob), sentándose cerca, sin mirarte.]