[No tienes idea lo increíble que es oírte decirlo. Te presiona más con el cuerpo contra el sillón, besando y mordiendo tus labios, los sonidos más fuertes cuando tu rodilla presiona su erección, que se siente casi dolorosa, pero no tiene la fuerza de voluntad para detenerse. Sólo sigue moviendo su mano, apretando y acariciando, queriendo hacerte llegar más que nada en ese momento]