MEME: DARK FAIRYTALES
¿A quién no le gusta un final feliz?
Lamentablemente, la vida no siempre parece ofrecernos uno. Pero hemos aprendido, a través de los cuentos de hada, que hay muchas maneras de alcanzar la felicidad... aunque, para hacerlo, es necesario perder algo primero. Los adorables objetos encantados, los animales cantores y las simpáticas hadas nos han hecho olvidar que, antes de que la mágica luz del cine iluminara nuestras infancias, primero existió un denso y oscuro bosque. El denso y oscuro bosque de los primordiales temores de la humanidad, al que los cuentos de hadas nos arrastraban con fuerza subyugante cada vez que escuchábamos, como una puerta misteriosa que se abre, el consabido...
Hay que perderse, antes de encontrarse.
Incluso enfrentados al más visceral de los miedos, a la más inquietante de las seducciones, al más terrible de los abandonos, tenemos la opción de hallar nuestra felicidad. La verdadera pregunta es: ¿realmente quieres un final feliz?
ℛEGLAS.
⚘ Comenta, identificando a tu personaje con su nombre y su canon en el subject. ⚘ Responde, escogiendo una de las historias propuestas, o alguna de tu propia cosecha. ⚘ Colorín colorado...
ℋISTORIAS.
1. BLANCANIEVES. Piel blanca como la nieve, cabello negro como la noche, labios rojos como la sangre... Qué curioso color, sin duda. Pero la mordida en la jugosa carne envenenada debe haber sido penetrante, porque de día encontrarás a la bella durmiendo tan profundamente en su sarcófago de cristal, que casi pareciera ser que la muerte se ha asentado en sus pálidas mejillas. Pero por la noche... ah, por la noche, tal vez no la encuentres dormida. Dicen que la maldición se levantará con el beso de un príncipe, pero ruega porque no te bese ella primero a ti.
2. EL PRÍNCIPE RANA. El agua del estanque chapotea con sonidos musicales, y entre los lirios y juncos se asoman dos ojos ambarinos que te miran con codicia. Con su voz profunda, su cabello de algas y su brillante y resbalosa piel, el príncipe Rana te invita a acercarte. Sólo un beso te pide, tentándote con una adorable pelotita dorada que quién sabe a quién habrá pertenecido-- sólo un beso y te convertirá en su princesa bajo el agua, tan fría y pálida como los peces.
3. CENICIENTA. Como un espíritu silencioso vagas entre los pasillos derruidos del antiguo castillo abandonado. Pero, cada noche, las cenicientas habitaciones en las que te refugias y los tristes salones decrépitos cobran vida otra vez, cuando los espíritus de los nobles retoman sus suntuosas celebraciones como si el velo de la muerte nunca las hubiera interrumpido. Te permites bailar y beber y enamorarte del príncipe fantasmal-- pero como cada noche antes, al dar las doce, la fiesta termina y los invitados se desvanecen. Lo único que te queda, además de esperar hasta la siguiente noche, son esas zapatillas de cristal que encontraste en un antiguo baúl...
4. LA BELLA Y LA BESTIA. Aventura querías, al adentrarte al bosque, y la aventura respondió a tu llamado. Él vino a ti en la noche, y te arrastró a su reino entre los árboles, su inmensa cornamenta como una corona, su suave pelaje como el manto de un príncipe y el sonar de sus pezuñas contra la oscura tierra una música propia. Tu amante es silencioso y oscuro-- oscuro, porque no te permite verle, ni siquiera cuando yacen en su lecho de hojas bajo las copas negras. Mientras paseas por su jardín de rosas te preguntas si llegarás a convertirte en una tú también, antes de que tus espinas se entierren en su corazón. La bella también puede ser una bestia.
5. CAPERUCITA ROJA. Los lobos aúllan bajo la luna de Walpurgis, y tú sientes los ojos amarillos clavados en ti mientras te adentras en el bosque. Te desean con un hambre voraz, y tú lo sabes, pero no es precisamente temor lo que sientes. Se piensa a sí mismo como el cazador, cuando se presenta ante ti con su puntiaguda y seductora sonrisa, y la pregunta es si entrarás a la cama con él cuando te invite. "No hables con extraños", te advirtió tu madre, ¿pero quién le advirtió al pobre lobo no dejarse cautivar por doncellas con rojo sobre su cabeza y en sus manos?
6. RAPUNZEL. "¡Deja caer tu cabello!" es la seña, y la hermosa y espesa cabellera caerá cuán oscura y larga es, como la torre sin puertas ni ventanas que mantiene atrapada a la mujer. Una bruja malvada la atrapó allí hace muchos años, dicen las historias, pero, ¿cómo estar seguros de que no se ha cansado de esperar? ¿Cómo estar seguros de que no es ella la bruja ahora, atrayendo los incautos como moscas a la red con su hermoso canto? ¿Cómo saber que el sedoso cabello que cepilla y arroja por la ventana es realmente suyo? Cuántos cueros cabelludos, cuántas hermosas cabezas serían necesarias para crear semejante escalera...
7. EL GATO CON BOTAS. Cuando terminas la invocación, frente a ti se sienta un hermoso gato negro que pronto se transforma en un hermoso y oscuro hombre. Sus ojos astutos, su sonrisa seductora y sus palabras empalagosas no suavizan el filo con el que te llama "Amo" y promete resolver todos tus problemas, conseguirte todo lo que desees. Y presto como un gato (siempre como un gato) seduce por ti, roba por ti y mata por ti, sin pestañear ni dejar de relamerse con indiferencia. Cuando tu ambición te lleva a desear el castillo y la fortuna del ogro y notas el brillo fugaz en los ojos del felino, comienzas a preguntarte cuánto tiempo pasará antes que se vuelva contra ti y entierre sus garras en tu espalda. Después de todo, esta clase de servicios siempre conllevan un precio...
8. LA BELLA DURMIENTE. Hermosa y rodeada de espinos en flor, así es como te la encuentras cada vez en tus sueños. La solitaria rosa silvestre lanza sus lánguidos brazos alrededor de tu cuello, y entre besos eternos y susurros enfervecidos te pide que no la abandones-- te ruega que la encuentres y la despiertes, que la liberes de su maldición. Tú no sabes qué fortuna la trajo hacia ti, sólo sabes que cada segundo despierto deseas estar dormido otra vez, soñando con ella. Así que ignoras el mortal agotamiento de tu cuerpo, ignoras las marcas de espinos en tu piel, e ignoras la desgarradora tristeza de sus ruegos, mientras la besas como si la vida se te fuera en ello... Y la vida se te va en ello...
9. HANSEL Y GRETEL. Cuando una familia no tiene qué comer, los hijos siempre sufren. Así que tú y tu hermano se hallan perdidos en el bosque, hambrientos y desesperados, hasta que encuentran la brillante casa de la amable anciana que se apiada de ustedes y les permite entrar. Luego todos comprenderán cuando se enteren que la anciana era en realidad una terrible bruja que intentó comérselos, y nadie cuestionará la casa quemada, ni el oro que triunfantes traen de regreso a casa. Incluso traen carne a su mesa-- algo dura y vieja, pero carne al fin. Un trabajo bien hecho.
10 LA SIRENITA. Bajo la superficie de las aguas oscuras, observas al apuesto humano asomándose por la borda del barco. Curiosidad te produce, y te cautiva su apariencia tan ajena a la tuya, sus piernas que le permiten moverse por sobre el agua. Envidias esas piernas, y decides poseerlas. El dulce canto de la sirena atraerá el barco a los roqueríos sin duda, y luego podrás arrastrarlo a las profundidades contigo en un beso eterno. Lástima que nadie te haya enseñado a amar algo que puede ahogarse.
11. ALICIA EN EL PAÍS DE LAS MARAVILLAS. Tic toc, tic toc, tic toc. El sonido del reloj es enajenante y sientes que caes y caes por un agujero, sin dejar de oírlo. "Aquí estamos toooodos locos" te advierte el gato, sonriendo, y tú le sonríes de regreso. ¿Por qué habría de pensar que tú no lo estás también? Ah, qué hermosa piel de conejo tienes ahora, y qué rojas quedaron las blancas rosas. Con un jardín como ese, te vas a convertir en una espléndida reina, eso seguro... ¿Por qué el Sombrerero no deja de reírse? ¡Que les corten la cabeza!
12. BONUS. Puedes usar otro cuento o inventar tu propia versión alternativa, si ninguna de las anteriores te convence.