Físicamente Sakura no ha cambiado desde que llegó a la mansión. Suele usar faldas o vestidos mayormente. Sakura nunca se quita una cadena de plata (regalo de Fay de cumpleaños) que tiene colgado un anillo con un cuarzo rosa en forma de corazón (regalo de Kyouya de cumpleaños).
Generalmente pasa el día entre la cafetería, donde trabaja de mesera, o en la estética a visitar a Fay. Antes iba bastante al restaurante para pasar tiempo con Clow y Kero.
Si no está ahí puede estar cuidando a los niños pequeños, a los muchos peluches (esto incluye babysittear a los hijos de Tamaki y Kyouya) o ayudando a preparar comida en la cocina de la mansión.