[Su cerebro ha dejado de funcionar y ahora su instinto es lo que guía sus acciones. Su cuerpo le pide más, le dice que quiere estar tan cerca de ti como sea físicamente posible y tenerte en sus brazos.
El beso es lento e insistente, deseoso pero repleto de cariño no dicho. Sin embargo, eventualmente el aire será indispensable para ambos, así que se verá obligado a romper el contacto, pero se quedará con su frente pegada a la tuya.]