[Siente escalofríos, tanto por tu tacto como por la visión que le ofreces. Puede que tu parte baja no reaccione con tu nueva condición, pero la de él si logra hacerlo, un poco. Toma aire despacio sin despegar sus ojos de ti y quiere quejarse como es su usual por la mordida, que duele un poco, pero es hipnotizante ver lo concentrado que estas bebiendo sangre de su pierna.