*Suspira pegando su frente contra el cristal de la ventana. LLovía a mares así que había suspendido cualquier plan para salir con sus amigas. Hacía como un par de semanas que Lavi se marchó de viaje y lo echaba de menos desde el primer día. Pasaba tanto tiempo con él que ya no se sentía a gusto si salía por ahi con los demás, porque era como si le faltase algo.
Esperaba que al menos, él se lo estuviera pasando bien y que disfrutase del buen tiempo que ella no tenía. Camina hasta su cama y se deja caer allí, observando el techo de la habitación. Lo echaba de menos, muchísimo de menos en todos los sentidos.*