[Aún se siente algo atontado cuando escucha a la persona sobre él disculparse una y otra vez. Obviamente se siente furioso, por lo que busca a Mugen con una de sus manos a pesar de que apenas puede moverse gracias a ese peso.
Entonces escucha que le pregunta quién era. Cierto, probablemente era el único que había cambiado y ese pobre infeliz era un buscador que estaría muerto en cuanto recuperara su cuerpo. Aunque no tenía que matarlo si no se enteraba que era él. Después de todo, lo último que quería era a uno de esos imbéciles alardeando que estuvo encima suyo, aún si era con cuerpo diferente (y era probable que precisamente por eso presumiera más, el sólo pensamiento le hizo sentirse aún más enfadado).
Pero entonces mira el rostro de ese tipo y nota las enormes ojeras que el otro tenía. Entrecierra los ojos]