[Casi se atraganta con la lechuga que acababa de echarse a la boca. ¿En qué cosas está pensando Yu? Sí que le gustan las mujeres, ¿pero qué chiste tiene si sabe que dentro todos son hombres? Yu y él incluídos.]
Me gustan, y mucho, pero no es lo mismo tocar algo extraño que tienes tu mismo y que nunca ha estado ahí, a tocar a alguien que tienes enfrente...
[Y eso de lo que hacen los demás con sus cuerpos no tenía porqué decirlo. No culparía a algunos porque el cuerpo que les había tocado es bastante tentador, pero en otros... como la abuela Bookman, de hecho un escalofrío recorre su espalda nada más de imaginarse semejante cosa.]
¿O qué? ¿No me digas que tu sí te has entretenido con ese cuerpo que tienes?
[Sí, claro, la sola imagen de Yu tratando con ese cuerpo, es imposible y de risa.]