[¿Qué decía? ¿Que quería quedarse con él para siempre? ¡Ese niño estaba loco! Quiso soltarse de inmediato, pero de pronto ya estaba en el salón de clases, con una señora enfrente que les ordena a todos que guarden silencio y que se sienten de una vez.
Ve esta su oportunidad para huir, queriendo soltarse de la mano de ese niño, pero le tenía agarrado tan fuerte que no entendía cómo era posible que un mocoso que se veía tan debilucho pudiera apretar su mano tan fuerte]
¿Qué haces?
[Pregunta, seguro que tontamente. Esperaba que lo soltara porque no sabía cómo sería compartir mesa con ese niño. Aquello le estresaba un poco más de lo que quisiera admitir]