*Cuando escucha la voz de Kanda irrumpiendo en el salón, se incorpora de inmediato en el sofá, soltando el brazo de Lavi que estaba a punto de mordisquear en serio. ¿Había oído bien? ¿Kanda preparando Mitarashi Dango?
No es hasta que puede ver el platillo con los dulces en él, que no cree las palabras de Alma. Ahí estaban todos esos pinchitos dulces esperándole y tenían un aspecto realmente delicioso*