*Por no decir fanfarronería. No sería el primero que le dice que iba a echarle el polvo de su vida, y esperaba que no fuera el último. Hombres. ¿Por qué todos tenían esa necesidad de fardar y demostrar lo que valían? Qué monos. Como si tuvieran que ganarse su interés con eso.
Continúa bajando las manos por su pecho, topando con la hebilla de su cinturón y desabrochándolo con toda la naturalidad y soltura que le propiciaba haberlo hecho miles de veces antes.*
Para empezar vamos a quitarte esto. Improvisaré sobre la marcha.
*Dice sin apartar la vista del muchacho. Se veía tan animado, deseoso de continuar ya fuera por Deak o porque debía estar apretado en sus pantalones desde hacía rato que su cuerpo se agita bajo el de él con la misma impaciencia. Y conocía más de una manera de solucionar eso. Y más de diez.
Tener algo en mente, había dicho. No era tan fácil elegir algo que no dejara secuelas en el cuerpo de Lavi, pero encontraría alguna cosa que los dejara satisfechos a ambos. No se arriesgaría a que Deak sospechara nada por mucho morbo que le diera el peligro.*