[La forma en la que el otro le está hablando tan sólo le hace pensar en el "otro yo" de Alma. Era Renge la que estaba preocupada, ¿no era así? Estaba enfermo, como él. Sólo que la enfermedad era diferente. No sabía si Alma se había dejado llevar o era por Renge lo que había pasado.
De cualquier manera, no se podía tomar en serio ningún tipo de arraigo emocional. Porque lo que él sentía era por Alma, no por esa persona llamada Renge. Tal vez no podía decir que Alma era su amor verdadero o la única persona en su mundo, pero tenía ese algo que le atraía mucho. Tampoco él quería irse, incluso ese idiota lo sabía. Resopla]
Deja de paniquear. No pretendo que nos descubran, ¿acaso tú sí? No va a pasar nada.
[Se autoconvence y más le vale al imbécil que haga lo mismo cuanto antes]