[Prácticamente tiene que aferrarse a la silla para no caer luego de que el conejo se lanzara contra él. Sólo que no era el conejo. Ni tampoco era Junior. Eso tendría que recordarlo constantemente con tal de no perder aún más la razón y concentrarse en lo que tenía que hacer. Aunque autoconvencerse de que esto era un sacrificio para él sería mucho más difícil]
Recuéstate en la cama y empieza a hablar.
[Le dice, aunque en realidad le toma de los hombros para que se separe del todo de él y haga lo que le pide. Le mira por unos segundos antes de deslizar ambas manos por los costados del conejo, poniéndose de pie para posar sus labios en el cuello desnudo del otro, tan sólo rozándolos contra su piel]