C-creo que... Creo que tengo que ir a bañarme, sí...
[Le tiembla un poco la voz, aunque no sabe porque de repente se siente con ese estado de ánimo tan bajo. Vamos, no es una chica para ponerse sentimental por quién sabe qué cosas, pero aún así no puede evitar parpadear un par de veces preguntándose por qué los ojos le pican como si tuviese ganas de llorar.
No es por el hecho de que le sugiera separarse tan pronto. Es algo que ni él mismo sabe explicar, aparte que empieza a sentir ese dolor físico correr por todo su cuerpo, así que se mueve un poco como indicándole que debe levantarse para que pueda irse.]