*Para eso estaba ahí, para ayudarles. Esa frase se le queda en la cabeza unos segundos, acompañando al gesto en el rostro de ese chico. Palabras dulces de alguien con buena voluntad. Era más de lo que esperaba encontrar luego de tanto miedo, pero no sabe si creérselo, porque por muy buenas que sean sus intenciones no está segura de si realmente algo funcionará contra Deak. Y ni siquiera está segura de querer intentarlo.*