Nh. El chico está bien. Pero Deak lo había lastimado mucho cuando lo encontramos. Tuvo suerte de que consiguiéramos llevarlo con nosotros.
*O de lo contrario podría haber muerto de verdad. Pobrecillo. Incluso les contó todo lo que había hecho para llegar hasta allí. Una prueba más de que con ese tipo no se podía bromear. Pero al menos ese niño ahora no estaba solo, ella misma y los demás cuidarían de él.*
Deak no se anda con chiquitas. Yo también sufrí en mis carnes su prepotencia.