[Bien, esa había sido su última oportunidad y la había desperdiciado. Si llegaba a odiarlo después, cuando saliera, entonces sería un completo imbécil pues le había rechazado. Maldito idiota.
Así que no se haría más del rogar, sobre todo si la desesperación del otro era claramente porque quería que se la metiera ya. Masoquista, definitivamente masoquista.
Empieza a introducirse en el interior de Alma, apretando los dientes por sentir esa estrechez que hacía tanto no disfrutaba. Joder, era mucho mejor de lo que esperaba]