[Decía que no iba a arrepentirse, pero lo dudaba mucho a decir verdad. Tarde o temprano, Alma saldría de ahí e iba a maldecir todos los días de su vida lo que pasara aquí. Pero había dicho que no iba a arrepentirse, así que ya no era su culpa. O al menos de eso trata de convencerse. Chasquea la lengua]
Busco algo para que no te duela tanto, idiota.
[Tenía algo de loción ahí, aunque no pensaba que fuera a utilizarla para algo más que para hacer más cómodo tocarse a sí mismo. Aunque, ¿a quién engañaba? Era obvio que la había comprado porque esperaba que algo como esto pasara algún día]