*Cada vez sentía que se estaba perdiendo en la conversación con el doctor. Quería esa medicación de la que le estaba hablando, sobre todo si iba a ser tan fuerte como para conseguir hacerle dormir profundamente y que no tuviera ninguna pesadilla, pero las cosas que estaba diciendo...*
No se por qué estás insinuando que sería peligroso. ¿No sois vosotros los doctores y las enfermeras los que supuestamente cuidaís de nosotros? Ya sé que cualquiera de ellos puede entrar aquí, incluso tú podrías hacerlo.
*Algunos médicos no le caían en gracia especialmente y tampoco confiaba demasiado en ellos, pero de eso a pensar que alguno podría hacerle daño mientras dormía... Simplemente, era extraño*
Pero está bien, no cambies mis medicinas si con eso voy a evitar que te cueles aquí en la noche y me abras en canal.