*No hace caso. Le duele. Sabe que debería parar. Pero estaba a un paso de acabar con todo y no podía echarse atrás ahora, mucho menos cuando no sabía si volvería a poder salir. Tal vez Deak no se lo permitiera más. Así que continúa escribiendo, era lo único que podía hacer ahora a pesar de que no estaba consiguiendo explicarlo como debería. Ni decirle todo lo que quería que supiera.
Entonces, entre las punzadas incesantes que sacudían su cabeza, recuerda algo importante. Algo que el señor médico le pidió que escribiera. Sí, con eso, "Lavi" debería ser capaz de asimilar todo lo que pasaba. O esas eran sus esperanzas al menos.*
¡Créeme por favor! ¡Recuerda el poncho del abuelo! ¡Tú lo-
*Se agarra la cabeza otra vez cuando siente un dolor más fuerte, soltando el lápiz de cera de su mano y abrazándose a sí mismo en un acto reflejo. No podía seguir más.*