Estas babuchas no están diseñadas para los 100 metros lisos, Yuu.
*Demasiado mal se podía mover con la ropa del psiquiátrico como para exigirle más, pero de todas maneras va un poquito más rápido sólo para que no lo regañen.
Ese camino hasta el despacho era ya tan familiar, tan cotidiano que realmente le hace sentir mal. No quería tener que involucrarse demasiado con ese sitio; a diferencia de otros enfermos, definitivamente su lugar no estaba ahí. Tampoco es que estuviera tan mal, ¿no?*