*Baja por fin y se acerca al niño japonés, aún sujetando con ambas manos la Inocencia. Se alegraba mucho de que Kanda después de todo no estuviese tan enojado, ni con ella ni con Lavi y tal vez eso quería decir que no se lo había pasado tan mal, sobre todo porque se había reído con ganas. Aún así siente que de todas formas debe disculparse.*