Con la nieve se pueden hacer muchas cosas, además es muy divertido jugar con ella.
*Se dirige al mayor mientras termina con el abrigo y con los guantes a toda prisa. Sería la primera vez que tenía la oportunidad de poder hacer algo como eso con los niños y sólo la idea la emocionaba demasiado*
Tapaos bien la nariz, que si no luego se pone roja como la de un payaso.
*Pero siempre había tiempo para un pequeño recordatorio*