Oh, ya llegamos. [En frente de ellos hay una hermosa cabaña de techo de tejas rojo, apenas visible bajo una enorme capa de nieve. Se queda maravillada mirando las luces. No puede comprender como le hacen las pequeñas velas parpadear y cambiar de color.]
Oye, ¿esa es la magia de la que hablas? [señalándote las luces.]