[Oh, eso es agradable. Y siempre fue de contacto físico, incluso con su par de años entre la cárcel y la muerte, siente que lo extrañó demasiado. Que le hizo falta mucho más de esto, de ti.]
Yo, Canuto, lo juro solemnemente. [Te mira directamente a los ojos con esa intensidad que siempre lo ha caracterizado.]