[El motor ruge con fuerza. Pero la muchacha emprende marcha con facilidad, el viento agitando su abrigo. A esta hora de la mañana la carretera está prácticamente despejada, salvo por los muchos familiares repartidos a los lados que comenzarán a aparecer a la hora de viaje.
De la iglesia, de otros magos, de otros Masters - Londres está celosamente observada.]