Era un ejemplo. En ese tiempo Yashamaru me explicó que a veces algo podía doler sin que hubiera una herida. [Pone una mano a la altura de tu corazón.] Aquí. Eso era todo lo que sentía.
Pero ahora puedo tocarte, y hacerte sentir bien. Y tú puedes tocarme de vuelta. Ya no duele aquí, tengo compañeros y una razón para vivir. Eso es increíble, sentir de esta forma es incomparable.