Muy bien, entonces presta mucha atención. [Ondea un poco las manos mientras comienza a dar una vuelta sobre su propio eje, manteniendo un movimiento corporal sumamente elegante... hasta que espera el momento exacto para ir y lanzar levemente uno de los abanicos en el aire antes de volver a atajarlo para seguir con la improvisada danza.]
Es algo que va más o menos así. La cosa es que nunca dejes de moverte.