[Joven, demasiado joven... nada extraño para ese lugar, pero no podía dejar de ser el primer pensamiento que cruzaba su mente ante la nerviosa introducción del nuevo chico que había sido vendido al lugar.
Tsurugi no era realmente alguien que aceptase estudiantes, era demasiado trabajo sin remuneración alguna (una totaaaal molestia)... y a la larga, incluso podía ser perjudicial para su propia clientela...pero se lo habían asigando sus superiores , así que honestamente no podía hacer mucho al respecto.
(Tampoco era alguien tan retorcido como para dejarlo a su suerte o arruinar su carrera , sin importar lo mucho que dijese que no era una buena persona... Si el pobre chico había terminado ahí por no tener mejores opciones...eso era algo con lo que Tsurugi podía empatizar)]
Yo~ Mahiru-chan. Desde hoy te enseñaré un montóoooon de cosas, pero Tsurugi-chan es una persona ocupada y solicitada, así que tendrás que perdonarme si no puedo dedicarte tanto tiempo. Ya sabes, el tiempo es oro.