Ha, seguro. [Y sin dudar le da un sorbo largo a su sake.] Ese idiota aún no puede confiar en mí, por mucho que ahora intente decirme lo contrario. En el fondo aún cree que lo que hago es una estupidez, así como todos ustedes lo creen. Todos creen que lo que hago es una soberana estupidez. [Cuando él nunca se había sentido más lúcido en toda su vida. Las contradicciones.]