[Finalmente termina por morderse el labio inferior y seguir en su cometido. Al... diablo con lo que quería decirte, ya pareces bastante más compuesto que cuando llegó y eso es lo importante. Debido al silencio se concentra más en su labor, remojando el paño una segunda vez para dedicarse por completo a tu espalda. Delinea tu columna vertebral así como también lo hace con las costillas, limpiando cada pequeño trozo de piel que tiene disponible con realmente dedicación y cuidado.
Es obvio que no está al tanto de tus inseguridades, porque siempre estás ocultándolas. Pero al menos espera dejarte claro con lo que está haciendo que para él, vales más que nadie. Y por lo mismo te mereces este trato, nada menos, e incluso más. Está trabajando por llegar a aquel día donde pueda darte más.]