[Suenas muy convincente. En especial cuando no es el único que reconoce tu maestría para bromear. Así que antes de que sigas parloteando te va a poner el índice sobre los labios para que guardes silencio.] Mi buen amigo, estoy consciente de que tu maestría en la lucha te hace tolerable a estas heridas, pero no arriesgues más de lo necesario tu alma en batalla.
Perderte le causaría una gran angustia a nuestra pequeña Saniwa, ¿no lo crees?