Nov. 15th, 2019 at 12:21 AM
[Backdatteado al 31 de octubre.]
[En algún lugar de Transilvania, cae la noche.
Y con la noche, cae la tormenta que ha estado amenazando el horizonte con su oscura silueta por horas. De hecho, no es tanto que el sol se pone, más como que las nubes negras lo engullen como un inmenso animal oscuro, la luz del atardecer filtrándose por los resquicios, roja como la sangre de una presa incauta goteando entre los dientes de su cazador. Y a medida que muere el sol, descienden las sombras sobre el valle, y un viento salvaje que une su aullido con el de los lobos en lo profundo del bosque.
No pasa demasiado tiempo hasta que los primeros truenos y relámpagos comienzan a retumbar, bajando por las montañas, y una lluvia intensa cubra toda la tierra como un manto, desde las tumbas en el cementerio hasta los imponentes y sombríos castillos. Esperamos que cada uno de ustedes esté a salvo en sus hogares, en sus refugios, porque es en noches tormentosas como esta que oscuras criaturas salen de sus guaridas a acosar a viajeros imprudentes, a pobladores temerosos.
A menos, por supuesto, que ustedes sean esas criaturas. Entonces, seguramente, querrán aprovechar la protección de la tormenta infernal para sus propios oscuros, sangrientos asuntos.
Al resto, recomendamos cerrar bien sus casas, trabar las ventanas y mantenerse alejadas de ellas, y no responder a llamados seductores desde el otro lado, ni a miradas hipnóticas, ni mucho menos abrir la puerta a aquella voz encantadora que ruega poder entrar. No, nada de eso sería buena idea. Lo mejor será mantener un crucifijo cerca, por si las dudas, y tal vez comer una buena cena a base de ajo antes de ir a dormir... si es que logran pegar un ojo.
Y aún así es posible que, luego de la medianoche, cuando la tormenta amaine y las nubes se disuelvan lentamente y le abran paso como un telón a la luna blanquecina, una extraña niebla entre por sus ventanas y de pronto encuentren de pie junto a su cama a un hermoso y pálido extraño, que los invitará a fundirse en un apasionado abrazo, a unir sus corazones de maneras más literales, macabras.
Por suerte para ustedes, hay héroes silenciosos esperando en la oscuridad, moviéndose furtivamente y siguiendo los rastros de estos espectros de la noche, revisando criptas abiertas y escalando torres siiniestras, preparando estacas y ballestas para evitar que la muerte se extienda como una plaga por el pueblo, e invada las venas de aquellos que aún le pertenecen a la vida.
Pero será mejor que se apresuren, aquellos que cazan, y aquellos que huyen. Porque los muertos viajan deprisa.
Será una larga noche, pero mañana las sombras de la oscuridad serán sólo una desagradable pesadilla, el valle entre las montañas un recuerdo del pasado, y la sed maldita que los aqueja un mito y una historia. Tanto los vivos que estén muertos como los muertos que no lo están serán regresados a su naturaleza original... pero mientras tanto, las sombras de la oscuridad, el valle entre las montañas y la sed maldita son muy, muy reales.
Por lo menos hasta que, en algún lugar de Transilvania, amanece.]
((¡Último post de nuestro evento de vampiros! Tal como dice, una vez que amanezca todo volverá a la normalidad, tanto el escenario como los personajes, que recuperarán (o perderán) sus habilidades de siempre. Esperamos que lo hayan disfrutado. ♥))
[En algún lugar de Transilvania, cae la noche.
Y con la noche, cae la tormenta que ha estado amenazando el horizonte con su oscura silueta por horas. De hecho, no es tanto que el sol se pone, más como que las nubes negras lo engullen como un inmenso animal oscuro, la luz del atardecer filtrándose por los resquicios, roja como la sangre de una presa incauta goteando entre los dientes de su cazador. Y a medida que muere el sol, descienden las sombras sobre el valle, y un viento salvaje que une su aullido con el de los lobos en lo profundo del bosque.
No pasa demasiado tiempo hasta que los primeros truenos y relámpagos comienzan a retumbar, bajando por las montañas, y una lluvia intensa cubra toda la tierra como un manto, desde las tumbas en el cementerio hasta los imponentes y sombríos castillos. Esperamos que cada uno de ustedes esté a salvo en sus hogares, en sus refugios, porque es en noches tormentosas como esta que oscuras criaturas salen de sus guaridas a acosar a viajeros imprudentes, a pobladores temerosos.
A menos, por supuesto, que ustedes sean esas criaturas. Entonces, seguramente, querrán aprovechar la protección de la tormenta infernal para sus propios oscuros, sangrientos asuntos.
Al resto, recomendamos cerrar bien sus casas, trabar las ventanas y mantenerse alejadas de ellas, y no responder a llamados seductores desde el otro lado, ni a miradas hipnóticas, ni mucho menos abrir la puerta a aquella voz encantadora que ruega poder entrar. No, nada de eso sería buena idea. Lo mejor será mantener un crucifijo cerca, por si las dudas, y tal vez comer una buena cena a base de ajo antes de ir a dormir... si es que logran pegar un ojo.
Y aún así es posible que, luego de la medianoche, cuando la tormenta amaine y las nubes se disuelvan lentamente y le abran paso como un telón a la luna blanquecina, una extraña niebla entre por sus ventanas y de pronto encuentren de pie junto a su cama a un hermoso y pálido extraño, que los invitará a fundirse en un apasionado abrazo, a unir sus corazones de maneras más literales, macabras.
Por suerte para ustedes, hay héroes silenciosos esperando en la oscuridad, moviéndose furtivamente y siguiendo los rastros de estos espectros de la noche, revisando criptas abiertas y escalando torres siiniestras, preparando estacas y ballestas para evitar que la muerte se extienda como una plaga por el pueblo, e invada las venas de aquellos que aún le pertenecen a la vida.
Pero será mejor que se apresuren, aquellos que cazan, y aquellos que huyen. Porque los muertos viajan deprisa.
Será una larga noche, pero mañana las sombras de la oscuridad serán sólo una desagradable pesadilla, el valle entre las montañas un recuerdo del pasado, y la sed maldita que los aqueja un mito y una historia. Tanto los vivos que estén muertos como los muertos que no lo están serán regresados a su naturaleza original... pero mientras tanto, las sombras de la oscuridad, el valle entre las montañas y la sed maldita son muy, muy reales.
Por lo menos hasta que, en algún lugar de Transilvania, amanece.]
((¡Último post de nuestro evento de vampiros! Tal como dice, una vez que amanezca todo volverá a la normalidad, tanto el escenario como los personajes, que recuperarán (o perderán) sus habilidades de siempre. Esperamos que lo hayan disfrutado. ♥))