[Desde que regresó, sus problemas para dormir han estado aumentando, y si no fuera por el brazalete de Morgause, sus sueños estarían plagados de pesadillas.
El estar a la intemperie, sin su magia, y la constante preocupación por ser atacadas no ayuda a relajarse. Así que las aguas termales lucen muy tentadoras... pero se detiene en el borde, viéndolas con desconfianza. Parece demasiado bueno para ser cierto.]