Tierra de Nada

[Si bien el verano llama a días de playa, obviamente, también llama a fogatas por las noches, a compartir historias de terror y comida por un rato entre amigos o vecinos... Bueno, eso es lo que parece ser la idea de esta noche, porque hay fogatas de varios tamaños dispersas por todos lados.

Para que nadie las considere inútil en estas épocas modernas de lamparitas eléctricas y demás, habrá un apagón a partir del atardecer. Así que puede que estas fogatas sean aún más llamativas y atractivas para cualquiera, entre su acogedora luz y la posibilidad de pasar unas horas de la noche asando malvaviscos y otras cosas.

No sólo eso, sino que quedarse a solas en la oscuridad de sus casas, cabañas o embarcaciones parecerá cada vez menos tentador - habrá una sensación como de frío inusual para estas épocas, y empezarán a escucharse ruidos misteriosos, como el murmullo de gente que no está ahí hablando entre sí. Quizá varias de sus cosas terminen cayéndose al piso, o flotando por ahí inexplicablemente, o incluso siendo revoleadas hacia sus cabezas - difíciles de esquivar con la menor visibilidad, ¿o no? Quizá sientan una mano helada tocar su hombro, o incluso acercarse a sus cuellos... Nada que vaya a dejarlos estar tranquilos por un buen rato.



Y no sólo la luz del fuego permite protegerse de terminar noqueado al no ver una de sus novelas favoritas lanzada a través de una habitación, sino que el calor de las fogatas parece alejar todas esas sensaciones desagradables - las voces misteriosas, esas manos fantasmagóricas tratando de atraparlos, el frío que poco tiene que ver con el clima.

Pero bueno, de esta forma ya tienen su propia historia de fantasmas para empezar a contarles a los demás, si no se les ocurría ninguna. Todo sea por la inspiración.]