Todo el día || Todos lados
[¡Otro nuevo año, otro nuevo día en Nadalandia! El sol resplandece sobre los techos de la pequeña ciudad, los danbos caminan por ahí haciendo sus estandarizadas labores, los negocioso abren a la hora de siempre, el volcán lanza humo adormecido, el lago-mar brilla plácidamente, los monstruos y los porings corretean entre los árboles del bosque, las sombras se extienden sobre el cementerio, la Nada acaricia inexorablemente los bordes de este mundo y las fuerzas que lo controlan se sientan satisfechas detrás de la puerta que reza "Gerencia" en el edificio con aspecto de mansión.
Ah, sí. Hablando de la Gerencia, esta desea sinceramente que uno de sus propósitos para este año nuevo haya sido 'ser más honesto/a'. Porque, lo podrán cumplir mucho antes de lo que piensan.
Al despertar por la mañana, cada habitante de Nadalandia encontrará debajo de su almohada una nota con los mejores deseos de parte de la Gerencia, junto a una (1) piedra preciosa. Zafiros, rubíes, esmeraldas, amatistas, topacios, ónixes-- una variedad de piedras diferentes, pero todas grandes, como para caber cómodamente en la palma de la mano. Tal vez se pregunten por un tiempo qué clase de mensaje críptico será este, pero cuando nada más suceda, probablemente se limiten a guardar la piedra en un lugar seguro.
Y entonces, comenzarán a decir la verdad.
Pronto se darán cuenta de que es lo único que pueden decir. Lo cual puede que no sea en nada diferente a lo que hacen todos los días, o puede que sea ligeramente aterrador. Porque todos esos secretos, todas esas pequeñas o grandes mentiras, o todas esas verdades que se guardan todos los días, pronto quedarán al descubierto. Como, por ejemplo, el que detestas ese guiso que tu compañero de casa adora cocinarte, pero que no le dices para no herir sus sentimientos. O que engañaste a tu querido o querida con alguien más (o pensaste en engañarlo/a, que para algunos es casi lo mismo). O esa vez que hiciste trampa en esa apuesta de la que te sigues riendo hoy en día. O esos inoportunos sentimientos que guardas por esa persona, y que le confesarías sobre tu cadáver. O tal vez la larga lista de personas que has traicionado o asesinado. Ya sabes, cosas divertidas como esas.
Estén donde estén, no pueden ocultar la verdad, ¡ni pueden OCULTARSE de la VERDAD! A menos que tengan un búnker en el que ir a encerrarse, entonces así sí. Pero quién sabe, tal vez para algunos decir la verdad sea liberador, y termine en emotivas lágrimas, abrazos y palabras como '¡Fuimos tan tontos!', '¡Debí decirte esto hace tanto!' o '¡Seamos más honestos de ahora en adelante!'. O quizás simplemente termine con corazones rotos, lágrimas amargas y una que otra pelea a muerte. Lo de siempre.
Recuerden lo que dijo el sabio (o la sabia, por qué siempre asumimos que quiénes dicen estas cosas llevaban barba): "La verdad es como una piedra preciosa: es hermosa, pero si la arrojas sin cuidado puede herir a otros".
De lo que estamos seguros es que hoy todos terminarán siendo más ricos que ayer, en definitiva.
El asunto es, unos más magullados que otros.]
((¡Día de la verdad! Lo que salga de la boca de sus personajes será la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad. Disfruten, rompan cosas, aprovechen para el AC. ♥))
Ah, sí. Hablando de la Gerencia, esta desea sinceramente que uno de sus propósitos para este año nuevo haya sido 'ser más honesto/a'. Porque, lo podrán cumplir mucho antes de lo que piensan.
Al despertar por la mañana, cada habitante de Nadalandia encontrará debajo de su almohada una nota con los mejores deseos de parte de la Gerencia, junto a una (1) piedra preciosa. Zafiros, rubíes, esmeraldas, amatistas, topacios, ónixes-- una variedad de piedras diferentes, pero todas grandes, como para caber cómodamente en la palma de la mano. Tal vez se pregunten por un tiempo qué clase de mensaje críptico será este, pero cuando nada más suceda, probablemente se limiten a guardar la piedra en un lugar seguro.
Y entonces, comenzarán a decir la verdad.
Pronto se darán cuenta de que es lo único que pueden decir. Lo cual puede que no sea en nada diferente a lo que hacen todos los días, o puede que sea ligeramente aterrador. Porque todos esos secretos, todas esas pequeñas o grandes mentiras, o todas esas verdades que se guardan todos los días, pronto quedarán al descubierto. Como, por ejemplo, el que detestas ese guiso que tu compañero de casa adora cocinarte, pero que no le dices para no herir sus sentimientos. O que engañaste a tu querido o querida con alguien más (o pensaste en engañarlo/a, que para algunos es casi lo mismo). O esa vez que hiciste trampa en esa apuesta de la que te sigues riendo hoy en día. O esos inoportunos sentimientos que guardas por esa persona, y que le confesarías sobre tu cadáver. O tal vez la larga lista de personas que has traicionado o asesinado. Ya sabes, cosas divertidas como esas.
Estén donde estén, no pueden ocultar la verdad, ¡ni pueden OCULTARSE de la VERDAD! A menos que tengan un búnker en el que ir a encerrarse, entonces así sí. Pero quién sabe, tal vez para algunos decir la verdad sea liberador, y termine en emotivas lágrimas, abrazos y palabras como '¡Fuimos tan tontos!', '¡Debí decirte esto hace tanto!' o '¡Seamos más honestos de ahora en adelante!'. O quizás simplemente termine con corazones rotos, lágrimas amargas y una que otra pelea a muerte. Lo de siempre.
Recuerden lo que dijo el sabio (o la sabia, por qué siempre asumimos que quiénes dicen estas cosas llevaban barba): "La verdad es como una piedra preciosa: es hermosa, pero si la arrojas sin cuidado puede herir a otros".
De lo que estamos seguros es que hoy todos terminarán siendo más ricos que ayer, en definitiva.
El asunto es, unos más magullados que otros.]
((¡Día de la verdad! Lo que salga de la boca de sus personajes será la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad. Disfruten, rompan cosas, aprovechen para el AC. ♥))