[Suena la lengua y su mano se envuelve en llamas y energía. Carga hacia a tí y detiene tu ataque, con su mano y tiene que admitir que le quema algo probablemente por la inocencia que usas pero él no sabe eso. Su otra mano carga su espada a un lado, bien sabiendo que puede atacarte pero no lo hace. Sonríe.] Ataques sagrados, ¿huh?