Yo no soy cualquiera. [Voltea de golpe, poniéndose a pasear por la habitación como un animal enjaulado.] Esto es ridículo. Deberíamos estar buscando una forma de salir de aquí, no discutiendo si los magos existen. ¡Deberíamos estar en Roma! [La misión se va a arruinar a este paso.]