Está el ser privado: algo que es mi asunto y no corresponde a los demás.
Está el decir mentiras: pretender que algo falso es verdad.
[Alza un poco sus hombros] No conozco tu vida, por supuesto, y no he visto muchos motivos para querer hacerlo. [Respira despacio] Me disculpo por lo grosero que suena, si bien sigue siendo lo que pienso.