Bien, serías la primer-- segunda, si llegaras a hacerlo.
Sólo te advierto que, si llegara a suceder, no cuentes con mi obediencia, querida. Nada personal, pero, como pirata, no reconozco realmente las leyes de los monarcas. [Y ahora mismo sólo hay un príncipe ante el cual está dispuesto a responder, so.]