No me sorprende que haya venido con su mascota. [Sigue mirando a Cersei, y lleva lentamente una mano al lomo de Greywind, apoyándola ahí.]
No tiene importancia. Aquí no hay Fortaleza Roja o Guardia del Rey detrás de las que pueda esconderse. Y no le temo su Perro. [Tienen a Greywind y a Summer de ser necesario, después de todo.] Ella tendrá que responder ante mí del mismo modo que su arrogante hermano lo hizo.