[Va a rodear tu silueta para poder acercarse lo suficiente hacia tu hombro lesionado. Allí con cuidado va a pasar una gasa con alcohol sobre la lesión para limpiar la sangre antes de vendarte.
Realmente le preocupan esas muecas de dolor de tu parte ante cada movimiento que haces.] No es ningún agrado decirlo, pero este lugar tiene mucho más poder del que quizás habríamos imaginado que poseía.