[Él siempre está dando clases, Kat. A todos estos peasants.]
Un río, precisamente. [Mira significativamente al río que corre junto a ellos.] Los amantes estaban tan enamorados, que cada uno descuidó sus tareas. El rebaño de Hikoboshi se desperdigó por los cielos, y la Tejedora no tuvo a tiempo las telas para su padre, el Rey Celestial. Tentei, furioso, tendió un río entre ambos amantes, prohibiendo que pudieran verse.