No puedo oler a nadie más. [Vuelve a mirarte.] ¿Quieres que averigüemos? Si el resto de su aquelarre también está aquí, deberemos ser más cuidadosos.
[No porque no puedan contra ellos, porque él puede dejarlos a todos indefensos mientras tú les arrancas la cabeza, de ser necesario. Pero para ahorrarse molestias que no vienen al caso.]