Que haya intentado arreglarlo al final no borra todos los errores que cometí. Estaba demasiado cegado por mi propio orgullo como para pensar en ti, en Rin. Desprecié las ideas de mi padre y me desquité contigo, nunca estuve ahí para ti, no fui capaz de comprender tus sentimientos.
Si hubiese hecho algo de eso... aunque fuese una cosa. Tú no-- [Aprieta con más fuerza los puños, temblando ligeramente.]