No digas esas cosas, yo estoy muy orgullosa de ti. Eres un buen niño, de seguro ahora que estás grande sigues protegiendo a Tsubomi y Kousuke sin que ellos se den cuenta. [God, no quiere hablar de estas cosas, quiere seguir riendo en su ilusión un poco más.] Hey Shuuya...no quiero que desaparezcas, ¿juguemos un poco más? Tenemos una misión por delante.