Por supuesto, los espejos. [Hace otro gesto para que los fragmentos que hay cerca puedan convertirse en más flores y enredaderas y adornos que no causen daño]
Blanco y negro, amor y odio... a veces reflejaban el miedo de la persona, o su odio, o si no, lo que pudo haber sido en otro mundo, en otras circunstancias.
Mi reflejo y el de mi esposo trataron de matarse. [Hace un gesto suave con los hombros] Hay muchos heridos, y aun más sintiéndose responsables.