[Ya consiguió salir del agua, y tras sentarse un momento en la orilla para quitarse las botas y tratar de estrujar un poco su ropa (y tomar algo de aire y dejar que asiente todo lo que está pasando), ahora va caminando por el sendero que lleva de vuelta a la ciudad, con las botas en una mano y mirando alrededor como si estuviera despertando de un sueño... o entrando en otro.]